Cómo usar bien el embrague del coche
Aunque paulatinamente comienzan a integrarse en el parque automovilístico los coches automáticos, muchos conductores prefieren conducir usando el embrague. La transmisión manual tiene, frente a la automática algunas ventajas: ofrece un mejor control y aceleración y reduce el desgaste de los frenos y el motor.
Cómo tomarle la medida al embrague
Para los principiantes es recomendable practicar y familiarizarse con el pedal de embrague y la palanca de cambios con el coche apagado y el freno de mano accionado. Después presionar el embrague y mover la palanca de cambios hasta la cuarta velocidad y viceversa.
Con el motor encendido y el freno de mano quitado continuamos con las maniobras. Primero presionamos a fondo y colocamos la palanca de cambios en la primera velocidad. A continuación aceleramos mientras apretamos el embrague.
Después soltamos el embrague de una forma paulatina, evitando hacerlo rápido, porque si no, el coche no recibirá suficiente combustible, dará un tirón y se parará. Hay que seguir con este proceso hasta soltar el embrague por completo y el coche inicie su marcha.
A partir de este momento aceleramos hasta aumentar las revoluciones del motor, presionamos el embrague hasta el fondo y vamos cambiando de velocidad, de menor a mayor. Cuando reduzcamos la velocidad el proceso será el inverso.
Con estos ejercicios rápidamente adquiriremos automatismos y llegaremos a dominar el proceso del embrague/desembrague.
Si lo que tienes es alguna duda sobre el estado en el que se encuentra el embrague de tu coche, acude a tu EuroTaller más cercano. Te orientará y comprobará si el mecanismo de embrague de tu coche funciona a la perfección.