¿Pérdida de potencia en el coche? Te explicamos las causas que la producen
Tu coche puede perder potencia por diferentes motivos. Es importante identificarlos para definir la reparación correspondiente. Este tipo de pérdidas pueden tener su origen en razones internas (una avería de tipo mecánico) o factores externos como las altas temperaturas. Estas son algunas de las causas:
Falta de limpieza en los inyectores
Puede que algún inyector esté dando problemas de conexión debido a un mal contacto. Además de la pérdida de potencia notaremos una extraña vibración en el motor. Mantener en buen estado estas piezas protege de las averías.
Motores turbo
Si el coche tiene motor turbo, algo bastante frecuente, la pérdida de potencia puede deberse a este elemento. Un manguito en mal estado ocasiona una pérdida de potencia. También una válvula que no funciona bien está a veces detrás de este tipo de averías.
El sistema de refrigeración
Si el sistema de refrigeración está sobrecargado, motivado por la altas temperaturas exteriores, el electroventilador trabaja a destajo y resta potencia al motor.
Fallos electrónicos
En coches con sistemas electrónicos, los errores de este sistema provocan una detección errónea de un error mecánico en el automóvil, sin que realmente exista. El sistema da la orden al motor de que pierda potencia hasta detenerse. Al cabo de un corto lapso de tiempo, la marcha puede reemprenderse sin problemas.
El aire acondicionado
El aire acondicionado resta potencia al motor de tu coche. En determinadas circunstancias, como un adelanto en cuesta, el coche no tendrá suficiente fuerza para realizar este tipo de maniobras.